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Ideas de Aplicación Metafísica para la Lección Bíblica de la Ciencia Cristiana

“El Hombre”

del 1 al 7 de marzo de 2021 por Christie C. Hanzlik, C.S., • Boulder, CO

ccern@mac.com • 720-331-9356 • christiecs.com

Traducción libre por Maria Luisa Heron Autorizada por W. Huff

INTRODUCCION
La Lección Bíblica sobre “Hombre” es una profunda inmersión en lo que somos… nuestro propio ser. En sus escritos, Mary Baker Eddy utilizó la palabra “hombre” como un término neutral en cuanto al género para “el nombre de familia para todas las ideas, — los hijos y las hijas de Dios”.” (Cita C&S 2, 515: 21-8) Tal vez podamos pensar en “hombre” como un término neutral en cuanto al género como gato (en inglés) es el nombre de todos los gatos independientemente de su género.

Para muchas personas hoy en día, el uso del pronombre masculino como “neutral” es restringente, y para algunos es ofensivo. Los escritores modernos de hoy en día tienden a tener cuidado de usar un lenguaje neutral en cuanto al género. Incluso hay conferencias académicas para académicos que estudian “lenguaje de género” y muchos eruditos critican el uso de un pronombre masculino genérico para referirse tanto a hombres como a mujeres. En lo que a mi respecta, me esfuerzo por tomar las ideas de la Lección Bíblica sobre “El Hombre” sin dejar que los pronombres de género permitan interrumpir la inspiración.
Mary Baker Eddy consideraba el reflexionar en cuanto al uso de los pronombres. En la tercera hasta la decimoquinta edición de Ciencia y Salud, por ejemplo, Mary Baker Eddy se refiere al Espíritu, o Dios, en el género femenino como Ella and Su -de ella- en el capítulo “La Creación.” (marybakereddylibrary.org)

Claramente Mary Baker Eddy vio los límites del lenguaje para transmitir conceptos espirituales. Considera su declaración: “La principal dificultad para transmitir con exactitud las enseñanzas de la Ciencia divina al pensamiento humano yace en esto: como todos los demás idiomas, el inglés es inadecuado para expresar las concepciones y proposiciones espirituales, porque uno se ve obligado a usar términos materiales al tratar con ideas espirituales. La elucidación de la Ciencia Cristiana yace en su sentido espiritual, y este sentido debe ser ganado por sus discípulos para comprender el significado de esta Ciencia. De esta condición surgió la profecía concerniente a los apóstoles cristianos: ‘Hablarán nuevas lenguas’. (Ciencia y Salud con Llave de las Escrituras, Mary Baker Eddy, pág. 349:13)

TEXTO ÁUREO Y LECTURA ALTERNADA
Confieso que no entendí el Texto Áureo cuando lo leí por primera vez, así que observé de dónde viene en Deuteronomio. Es de una lista de promesas y bendiciones que Moisés ofrece a las diversas tribus de Israel antes de su partida. La frase del Texto Áureo “como vuestros días, así será tu fuerza” también ha sido traducida ‘que estés segura todos tus días’ (NLT) y es parte de la bendición eterna de Moisés para la tribu de Asher. También busqué la definición de Asher en el “Glosario” en Ciencia y Salud con la Llave de las Escrituras por Mary Baker Eddy. Dice: “ASHER (el hijo de Jacob). Esperanza y fe; compensación espiritual; los males de la carne reprendidos.” (pág. 581:15) Conectando estas ideas acerca de la fuerza eterna, la esperanza y la fe y los males de la carne reprendidos, empecé a ver que la bendición profética de Moisés es una promesa de dominio sobre la mortalidad para todos nosotros, para todos los tiempos, durante todos los días.
Esta poca investigación valió la pena el esfuerzo porque el Texto Áureo, como de costumbre, proporciona el tema central de la Lección. Esta frase concisa ofrece una promesa profética de fuerza, seguridad y dominio durante todos los días.

La Lectura Alternada comienza con otra bendición: “Bendito es el hombre que confía en el Señor, y cuya esperanza es el Señor.” Y luego vemos una descripción del hombre bendecido: “Será como un árbol plantado junto a las aguas…” (Jeremías 17:7,8)
Esta bendición, por supuesto, es una promesa de protección y provisión constantes de Dios, el Amor divino. El hombre no puede existir por separado de Dios, la única causa, proveedor, protector y saber-dor. La abundancia de Dios es nuestra abundancia. La Lectura Alternada concluye con una declaración concisa del vínculo seguro que une a Dios y al hombre que todos aman y que nos da nuestra autoridad: “Y me seréis por pueblo, y yo seré vuestro Dios”. (Jeremías 30:22)
Cada una de las secciones de la Lección, al menos la forma en que la entiendo se conecta a la idea de fuerza y dominio. Esta es una manera de ver el esquema de la Lección:
Sección 1: El hombre tiene dominio dado por Dios.
Sección 2: El hombre tiene dominio sobre [un sentido limitado del cuerpo
Sección 3: El hombre tiene dominio sobre el pensamiento sin claridad.
Sección 4: El hombre es recto e indestructible con el dominio dado por Dios.
Sección 5: El hombre tiene fuerza y dominio y no se cansa.
Sección 6: El hombre corre para ganar… con dominio!

SECCIÓN 1: El hombre tiene el dominio dado por Dios.
La primera sección establece el hecho de que el hombre tiene dominio. Dominio, que incluye “fuerza y poder” proviene del hecho de que nuestra fuente es el todopoderoso. (Citación B1, II Samuel 22:33)

Tenemos dominio porque estamos hechos a imagen y semejanza de Dios, quien tiene dominio supremo… no hay fuerza que pueda competir con Dios, y por lo tanto no hay fuerza que pueda competir con nosotros. Nosotros tenemos dominio.

A los amantes de los animales a veces les resulta problemático que la Biblia diga que tenemos “dominio sobre los peces del mar, y sobre las aves del aire…”, pero he encontrado este un principio muy útil al orar por los animales. (cit. B2, Gen 1: 26-28) Tener dominio sobre los animales no significa ser dominante o actuar más importante de lo que son. En cambio, puede significar que tenemos un sentido espiritual de su verdadera naturaleza, y nuestra conciencia del control absoluto del Amor divino para superar las tendencias animalistas como el miedo, el terror, los instintos depredadores o la violencia.
El hombre posee el sentido de Cristo y puede ver más allá de la apariencia externa de las cosas, y es consciente de la presencia y el gobierno del Amor. He escuchado varios testimonios de científicos cristianos que han expresado dominio espiritual cuando trabajan con caballos asustados o se han sentido seguros cuando involuntariamente se encuentran con depredadores como leones de montaña y osos pardos. Hay un gran artículo en el Christian Science Sentinel sobre un hombre que reza para salvar a un tiburón herido en el océano. (” El tiburón que salvamos”, William Deane, 19 de abril de 2010;

https://sentinel.christianscience.com/shared/view/44kd3cn614?s=e)

Dominion no se trata de ser malo o controlar. Se trata de tener una conciencia constante y permanente del control divino del Amor sobre todos, y ser inperturbado y libre de miedo y otras tendencias animalistas. Mary Baker Eddy afirma: “Al hombre, creado por Dios, se le dio señorío sobre toda la tierra”. (cit. C&S 1, 545: 10-11)

Tenemos dominio porque Dios tiene dominio y reflejamos a Dios. Como dice Mary Baker Eddy: “El hombre y la mujer coexistentes y eternos con Dios reflejan para siempre, en cualidad glorificada, al infinito Padre-Madre Dios.” (cit. C&S 3, 516:21)

SECCIÓN 2: El hombre tiene dominio sobre [un sentido limitado del] cuerpo.
Nunca había entendido del todo a Isaías 2:22: “Dejaos del hombre, cuyo aliento está en su nariz; porque ¿de qué es él estimado? ” Estas son un par de maneras de entender este versículo:
• “No pongas tu confianza en los simples humanos. Son tan frágiles como la respiración. ¿De qué sirven?” (NLT)
•”Deja de establecer asunciones y doblegarte sobre los meros humanos, tan llenos de sí mismos, tan llenos de aires de grandeza! ¿No ves que no hay nada para ellos?” (MSG)
En otras palabras, aparta de mirar al hombre mortal como una fuente de fuerza. En cambio, estamos mirando a una visión más alta y permanente del hombre, que está “maravillosas son tus obras” y cuya fuerza proviene del Amor divino. (cit. 6; Salmos 139:1, 14) Experimentamos dominio hasta el punto de que nos apoyamos en el infinito sostenedor en lugar de la fuerza del hombre corpóreo.

Como explica Mary Baker Eddy, el hombre es más que cerebro, corazón, sangre, huesos y el cuerpo y la mente materiales, que son temporales (limitados). El verdadero hombre es ilimitado y eterno. (cit. S5, 172:23; cit. S6, 302:3)

En cuerpo.
Me resulta útil aplicar el concepto de los tres grados en la página 115 de Ciencia y Salud, ya que estoy pensando en el cuerpo…
En mis conversaciones con otros científicos cristianos, he encontrado que muchos de nosotros parecemos tener una relación polémica con el “cuerpo”. Pero, es posible y deseable amar y estar en armonía con el sentido correcto del cuerpo. Encontramos salud cuando estamos en paz con el cuerpo… y entender la naturaleza espiritual de

El primer-grado, el cuerpo: Cerebro, corazón, sangre, huesos, etc.; Mortalidad; funciones incontrolables; envejecimiento; sujeto a los síntomas de la personalidad, el dolor y el placer insatisfecho; regido por la llamada higiene, nutrición, las leyes médicas; pecado (separación), enfermedad (inarmonía) y muerte (un fin); físico.

El segundo-grado, el cuerpo: inteligente, hermoso, lozano, estructurado; atlético, paciente, virtuoso, servicial, ordenado; cada vez menos centrado en el yo, creciendo en la gracia; la individualidad superando la personalidad; descubriendo la unidad con Dios; se complace en los “goces más elevados” (C&S 60, 31); moral; liberar una creencia en el pecado (separación), la enfermedad (inarmonía) y la muerte (un fin)

El tercer-grado el cuerpo: entendido como satisfecho, radiante, armonioso, inmortal, espiritual, individual y eterno; “la luz del mundo”; espiritual (del Espíritu); libre del pecado, la enfermedad y la muerte
El tercer-grado es, por supuesto, nuestra comprensión más pura del cuerpo, y la visión más clara de la realidad. A través de la oración descubrimos más acerca de la verdad de tercer grado de nuestro ser. “Contemplar en la Ciencia al hombre perfecto” es ver el tercer grado. A través de la oración, obtenemos un mayor grado de comprensión acerca del cuerpo y ganamos claridad sobre nuestro verdadero ser espiritual. De hecho, tal vez podamos definir la oración como avanzar hacia una conciencia de tercer grado, que es la semejanza a Cristo (misericordioso, abnegado). En mi experiencia diaria, parece que paso la mayoría de los momentos en segundo grado, esforzándome por estar alerta a las tendencias de primer grado, y, a través de la oración, tengo cada vez más momentos de conciencia de tercer grado. Cuando las irritaciones físicas tratan de insistir, uso esto como un recordatorio para ser más consciente de la realidad y la permanencia de la comprensión de tercer-grado.

La sanación ocurre en tercer grado, e incluso una visión del tercer grado, como un atisbo del sol a través de las nubes, es suficiente para una sanación real. El tratamiento de la Ciencia Cristiana es, en cierto modo, la aplicación de la conciencia de tercer grado a una situación específica. Para muchos de nosotros, cuando estudiamos la Biblia o Ciencia y la Salud, encontramos maravillosos momentos de conciencia en tercer grado en los que estamos “ausentes del cuerpo [de primer grado] y presentes con el Señor [que vive en la conciencia de tercer grado]”. (II Co: 5:8; C&S 14:1-22) Todos existimos en el cuerpo de tercer grado — individualizado en Alma — para siempre, y esta verdad de nuestro ser se está desarrollando constantemente en nosotros.
Consideremos esta declaración de Ciencia y Salud como una manera de pasar de un sentido de primer-grado de sí mismo/cuerpo a una conciencia de tercer grado de nuestro verdadero ser: “Despojar el pensamiento de confianzas equivocadas y evidencias materiales [primer grado] a fin de que las verdades espirituales del ser [tercer grado], puedan aparecer, este es el gran logro mediante el cual eliminamos lo falso [en primer grado] y, daremos lugar a lo verdadero. Así podemos establecer en verdad el templo, o [tercer grado] cuerpo, “cuyo arquitecto y constructor es Dios.” … Debemos darnos cuenta de la capacidad del poder mental para compensar los conceptos erróneos humanos y reemplazarlos con la vida que es espiritual [tercer grado], no material [primer grado]”. (cit. C&S 9, 428: 8, 19)
Nuestra conciencia espiritual nos da dominio sobre el sentido de primer-grado del cuerpo.
Por cierto, si encuentras útil esta aplicación de los tres grados, considera leer toda la página 115 y aplicar los títulos a otros conceptos: comida, hogar, familia, amistades, gobierno, derecho, iglesia, carrera, salud, romance/intimidad, etc. Y deseo que no dudes en compartir sus ideas conmigo.

SECCIÓN 3: El hombre tiene dominio sobre el pensamiento sin claridad.
La tercera sección, para mí, se trata de alejarse de las cosas que quitarían el dominio del hombre. En otras palabras, alejarnos de las cosas que induzcan al pensamiento turbio, o que nos hicieran menos que claros y alerta. La sección comienza con una declaración sobre negar deseos mundanos para asegurarnos de que vivimos “sobria, justa y piadosamente, en este mundo presente”. (cit. B10, Tito 2: 11, 12) La historia Bíblica que acompaña a estas ideas tratan sobre cómo evitar el embriagarse o evitar el pensamiento brumoso. (cit. B10, Jeremías 35: 1, 2, 5, 6, 7, 18, 19)

Durante un tiempo tumultuoso en mi vida, encontré el alcohol tentador y parecía encontrar todo tipo de maneras de justificar y racionalizar el socializar con el consumo de alcohol. Parecía difícil superar la tentación cuando la veía como algo para disfrutar… algo así como, “oh, merezco esto porque” o “oh, esto es divertido y no está lastimando a nadie más.” Pero, con el tiempo, me di cuenta de que esta tentación egocéntrica, me condujo a un sentimiento de odio, asimismo de vergüenza. Y definitivamente no condujo a una sensación duradera de alegría, estabilidad y progreso. Y aunque no entendía este punto en ese momento, ahora veo que una tendencia hacia cualquier indulgencia egocéntrica es una distracción de nuestro verdadero propósito…. de resplandecer, dar y bendecir… ¡este es el llamamiento de Dios para todos nosotros!

Lo que me ayudó a superar por completo cualquier deseo de alcohol y encontrar la máxima libertad de esta tentación es que me di cuenta de que beber conducía al pensamiento turbio. El pensamiento sin claridad interfiere con las solidas cualidades como la autoridad, el dominio y el estado de alerta. El embriagarse se llama literalmente estar “bajo la influencia”, y me di cuenta de que incluso una bebida estaría dando orden a la influencia del alcohol. La idea de la falta de claridad mental se volvió tan completamente desagradable para mí que la tentación se desvaneció. Nunca quiero tener un pensamiento sin claridad, ni quiero apoyar a una industria que promueva el pensamiento o la actuación brumosa o cualquier tipo de pensamiento o actuación “bajo la influencia”.

Dios le dio dominio al hombre, y nuestro dominio asegura que tenemos un estado de alerta natural. El hombre no puede estar “bajo la influencia” de nada más de lo que sea bueno. Ninguno de nosotros quiere ser aprovechado por nadie o cualquier otra cosa que no sea bueno. Tenemos un deseo natural e innato de dominio. Embriaguez significa deterioro del juicio y susceptibilidad a la influencia. Significa renunciar a parte de nuestro dominio y autoridad. En la Verdad (en la conciencia de tercer grado), el hombre no puede renunciar al dominio porque el hombre es el reflejo de Dios. Dios no puede embriagarse. Así que, por reflexión, el hombre [de tercer grado] no puede embriagarse.

Mary Baker Eddy resume estas ideas: “La obediencia a la Verdad le da al hombre poder y fuerza. La sumisión al error provoca la pérdida de poder.” (cit. C&S 11, 183:23)

SECCIÓN 4: El hombre es recto, indestructible y tiene el dominio dado por Dios.
La cuarta sección ilustra cómo utilizar las ideas del dominio del hombre para abordar los problemas físicos y sacarnos “de [nuestras] congojas”. (cit. B14, Salmos 25:17)
La sección utiliza la historia de Cristo Jesús sanando al hombre hidrópico en el día de reposo, desafiando retóricamente a los abogados y fariseos, diciendo: “¿Es lícito sanar el día de reposo?” (Cit. B18, Lucas 14:2-4)

La Biblia incluye detalles sobre sólo algunas de las curaciones de Cristo Jesús; sin embargo, siete de ellos ocurren el día de reposo. Estoy segura de que hay un buen estudio académico de la Biblia referente a este punto, pero, para mí, cada vez que veo que se produjo una curación en el día de reposo, es un recordatorio de que Cristo Jesús estaba anulando las leyes que limitaban al hombre. Las leyes que tratan de limitar al hombre incluyendo leyes fariseas, dietéticas y médicas. La Ley Divina mantiene y protege al hombre y le da dominio al hombre. Como dice Mary Baker Eddy: ” Todas las funciones del hombre verdadero están gobernadas por la Mente divina. “. (cit. C&S 18, 151:20)

Ella continúa: “la mente mortal [mente de primer grado] pretende gobernar todos los órganos del cuerpo mortal. Pero esta así llamada mente es un mito, y por su propio consentimiento tiene que ceder a la Verdad. Empuñaría el cetro de un monarca, mas es impotente. La Mente divina e inmortal le quita toda su supuesta soberanía, y salva a la mente mortal de sí misma. (cit. C&S 18, 151:31-5)

Cristo Jesús sostuvo el pensamiento perfecto de Cristo y vio justo a través de los límites de la ley mortal que trataría de gobernar el cuerpo [de primer grado]. Su visión correcta del hombre sanó absolutamente. Mary Baker Eddy estudió sus curaciones para descubrir principios que nos dan el dominio sobre la enfermedad para que podamos nosotros sanar también. Ella escribe: “Cuando los primeros síntomas de enfermedad aparezcan, (visión limitada) impugna el testimonio de los sentidos materiales con la Ciencia divina (la Palabra de Dios). Ella continúa: Elévate en la fuerza consciente del espíritu de la Verdad para derribar los argumentos de la mente mortal, alias materia, dispuestos contra la supremacía del Espíritu. Borra las imágenes del pensamiento mortal y sus creencias en la enfermedad y el pecado. (primer grado) Entonces, cuando seas entregado al juicio de la Verdad, el Cristo, el juez dirá: “¡Estás sano!” (C&S 20, 390:12-13, 32)

El hombre no puede ser puesto boca abajo o de lado o de adentro hacia afuera por las leyes falsas —”… el hombre no está invertido ni subvertido, sino que es recto y semejante a Dios.” (cit. C&S 21, 200:16)
Es nuestra visión clara y Cristiana la que nos permite ver al verdadero hombre, a nuestro verdadero ser, el tercer grado.

SECCIÓN 5: El hombre tiene fuerza y dominio y no se cansa.
La quinta sección enfatiza el concepto del ser incansable del hombre. Un rayo de sol no se cansa de brillar más de lo que el hombre se cansa de expresar Amor. Ser amoroso, ser sincero, ser sabio no es agotador. El hombre tiene dominio sobre la fatiga y nunca se cansa de hacer lo correcto.

En Mateo, Cristo Jesús dice: “Porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.” (B21, Mateo 11:28-30). En otras palabras, al seguir el camino de Cristo, encontramos que nuestro camino está libre de pesadas cargas.

Como escribe Mary Baker Eddy, “La ciencia-Mente enseña que los mortales no tienen por qué cansarse “de hacer bien” Ella disipa la fatiga que pudiera resultar de hacer lo bueno. Dar no nos empobrece en el servicio de nuestro Hacedor, ni retener nos enriquece. Tenemos fuerza en proporción a nuestra comprensión de la verdad, y nuestras fuerzas no disminuye por proclamar la verdad”. (cit. C&S 22, 79: 29-3)

Y añade en otro lugar: “Sea cual fuere tu deber, lo puedes hacer sin hacerte daño”. (cit. C&S 25, 385:17-18) Y, “Todo lo que mantiene el pensamiento humano en línea con el amor abnegado, recibe directamente el poder divino.” (cit. C&S 26, 192:30)

SECCIÓN 6: Corre para ganar… con dominio!
Esta sexta sección es un tratamiento maravilloso para expresar el atletismo, mental y físico. Nos anima a adoptar una postura metafórica de dominio y correr cada “competencia” con alegría. La sección se abre con la sabiduría de Pablo en sus escritos: “¿No te das cuenta de que en una carrera todo el mundo corre, pero sólo una persona recibe el premio? ¡Así que corre para ganar! Todos los atletas son disciplinados en su entrenamiento. Ellos lo hacen para ganar un premio que se desvanecerá, pero nosotros lo hacemos por un premio eterno”. (cit. B23, I Cor 9:24, 25, NLT)

Las notas agregadas de los investigadores del Sentinel Bible Lens son especialmente útiles para poner la declaración de Paul en contexto. Escriben: “La metáfora deportiva de Pablo habría tenido un significado inmediato para sus lectores. Además de los Juegos Olímpicos que se celebran cada cuatro años en Olimpia, los populares Juegos del Istmo tuvieron lugar bienalmente cerca de Corinto (donde el apóstol había pasado un año y medio enseñando; véase Hechos 18:11). Como hoy en día, los atletas que competían eran muy honrados y había festejos para los ganadores ….

“En esta imagen, Pablo compara la preparación para correr a la disciplina espiritual. De la misma manera que los atletas requieren entrenamiento riguroso y autodisciplina para lograr la victoria, los Cristianos necesitan un compromiso sincero con el “entrenamiento” mental que trae la salvación eterna”. (de las notas de investigación Sentinel Bible Lens con fecha del 1 de marzo de 2021 para la Lección Bíblica Trimestral de Ciencia Cristiana sobre “Hombre” en

https://www.christianscience.com/es/publicaciones-y-actividades/lecciones-biblicas/leccion-biblica-semanal

Hay tal profundidad en la Biblia cuando entendemos cada vez más y más como lo encontramos en su contexto. Imaginen lo que el autor de Nehemías estaba meditando en el momento en que esto se escribió, “porque el gozo de Jehová es vuestra fuerza”. (cit. B26, Nehemías 8:10)
Mary Baker Eddy expone las ideas de Paul sobre la fuerza y el dominio. Ella explica: San Pablo escribió: “Despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante” ”; esto es, ponga mos a un lado el yo y el sentido materiales, y busquemos el Principio y la Ciencia divinos de toda curación” (cit. C&S 28, 20:270)

Y la sección/Lección concluye con lo que podríamos considerar una maravillosa descripción de nuestro dominio dado por Dios: ” El gozo impecable —la perfecta armonía e inmortalidad de la Vida, que posee belleza y bondad divinas ilimitadas sin un solo placer o dolor corporal— constituye el único hombre verdadero e indestructible, cuyo ser es espiritual. (C&S 32, 76:22-26)

Gracias por tu atención a este Met, y mis deseos que tengan una semana llena de oportunidades llenas de alegría para demostrar tu dominio y fuerza dados por Dios.

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